DOS VELOCIDADES DE CRUCERO

♦ Por mucho que les pueda fastidiar a más de uno, debo reconocer que el alcalde chicharrero, José Manuel Bermúdez Esparza, le está echando bemoles al reto de dinamizar comercialmente la ciudad. Su teniente de alcalde, Alfonso Cabello Mesa, al frente de la Sociedad de Desarrollo, es un puntal que está que no para y quiere desarrollar de forma práctica, diligente y efectiva el llamado Plan Director Turístico de Santa Cruz de Tenerife. Creo que José Manuel Bermúdez va trabajando a una buena velocidad de crucero (nunca mejor dicho) y en cambio, lamentablemente, la velocidad que llevan la mayor parte de los empresarios de Santa Cruz (me refiero, sobre todo, de la Plaza de la Paz hacia el mar) no es la misma, ni muchísimo menos. No es de recibo que, frente a las acciones de dinamización desarrolladas por Alfonso Cabello, los empresarios respondan con una más que cuestionable y mediocre apertura de establecimientos.

FOTO 1.- Bermúdez y Cabello

José Manuel Bermúdez en la vanguardia, con Alfonso Cabello en retaguardia

EMPRESARIOS EN SANTA CRUZ

♦ El pasado día 8 de diciembre (fiesta de la Inmaculada) unos 14.000 cruceristas arribaban al puerto de Santa Cruz de Tenerife y (lo pude ver con mis propios ojos) más de la mitad de los establecimientos de la denominada «zona comercial turística» de la capital tinerfeña tenían sus puertas cerradas, incluido algún buen restaurante en la calle de San José (en el mismo centro del llamado «El Cuadrilátero» de Santa Cruz). Y el Centro Comercial Tres de Mayo, el Meridiano y El Corte Inglés deseando abrir y no termina de ampliarse la zona turística para ellos. Para mí que, en verdad de la buena, el secretario de la Federación de Áreas Urbanas de Canarias FAUCA, el inteligente pero muy callado y comedido, Abbas Moujir, está más por dicha ampliación de la zona y la liberalización de horarios (sabe que ambas cosas son imparables) que por otra cosa, pero prefiere no manifestarse públicamente en ese sentido por temor al propio presidente de FAUCA, Fernando Plasencia, al que le tiene más «miedo» que a su anterior «jefe», Luis De Miguel Bartolomé, cuando era presidente de la original Federación de Empresarios del Comercio (FEDECO).

FOTO 2.- Fernando Plasencia FOTO 3.- Abbas Moujir

Fernando Plasencia (i) presidente de FAUCA y Abbas Moujir, secretario general

BAILA EL CORTE INGLÉS

♦ Creo que (dicho sea con todo respeto) los empresarios tinerfeños (y los chicharreros en particular) deben «ponerse las pilas» para estar a la altura del momento que vivimos y las exigencias de una clientela que, cada día más, reclama mucha más oferta y mejores servicios. También sabe esto Fernando Plasencia, el presidente de FAUCA. Y además, iniciativas novedosas y acciones creativas, alegres y, en definitiva, atractivas… Como muestra un botón. No se pierdan el vídeo del flashmob, protagonizado por un buen número de empleados de El Corte Inglés de Tres de Mayo, implicados en la promoción y dinamización de la propia empresa donde tienen sus puestos de trabajo. Un flashmob (traducido literalmente del inglés como «multitud relámpago») es una acción organizada en la que un gran grupo de personas se reúne de repente en un lugar público, realiza algo inusual y luego se dispersa rápidamente. Felicito al gran equipo de profesionales de El Corte Inglés que lidera el lagunero Álvaro Rojas García, unas empleadas y empleados que han dado un ejemplo de profesionalidad y de cómo, en tiempos difíciles, hay que implicarse con alegría y entusiasmo para ayudar a su empresa y atraer a la clientela. Lo pueden buscar en YouTube poniendo: Navidad Corte Inglés Tres de Mayo. Ojalá otros despierten y tomen ejemplo.

FOTO 4.- Flash mob Navidad El Corte Inglés Tenerife

Algunos de los más de 130 empleados que participaron en el flashmob de El Corte Inglés, en pleno baile.

INJUSTA RUINDAD GASTRONÓMICA

♦  Mi querido y recordado amigo Manuel Iglesias García, uno de los mejores periodistas gastronómicos que ha dado Tenerife y Canarias, me enseñó que los que nos dedicamos por profesión a dicho sector, y que tenemos el privilegio de contar con una página de periódico o un micrófono de radio a nuestra disposición, teníamos que ser muy responsables y cuidadosos, a la hora de publicar la crítica de un establecimiento. Otro gran amigo y maestro, el periodista José Carlos Capel, presidente de MadridFusión y crítico gastronómico del periódico El País (uno de los más rigurosos, por cierto), me ha enseñado que, para ser responsable y valorado, la crítica gastronómica debe ir firmada por su autor y no vale (ni debe valer) esconderse tras un seudónimo, como está haciendo alguno por estos andurriales. No podemos, no debemos, es injusto jugar con el plato de comida (nunca mejor dicho) de muchas familias de profesionales, por culpa de una crítica desmedida que, encima, no va firmada con el nombre y apellidos (reales) de su autor. Y menos en un territorio pequeño, como es el caso de nuestras islas. Yo siguiendo los principios de Manuel Iglesias, o hago una crítica en positivo señalando, en todo caso, los aspectos a mejorar o, simplemente, me callo. El buen restaurante triunfará con toda seguridad… y el mediocre o malo, terminará cerrando, más pronto que tarde, por sí solo.

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Comedor del restaurante Brunelli´s, un gran steakhouse en el Puerto de la Cruz